Santo Domingo.- El ejercicio de la medicina en la República Dominicana es coartado por el Congreso Nacional y los legisladores dominicanos con su labor demuestran estar en contra de la vida de las mujeres y de su dignidad; violando la Constitución y acuerdos internacionales suscritos por el país.
Las afirmaciones fueron hechas por el doctor Victor Terrero, director del Consejo Nacional para el VIH y el Sida, cuando acompaño a la “Coalición por los Derechos y la Vida de las Mujeres” en una rueda de prensa en donde solicitaron a la Cámara de Diputados a no dejarse influenciar por presiones y acoger las observaciones de permitir el aborto cuando el embarazo sea fruto de incesto, violación sexual o mal formaciones.
Victor Terrero expresó que el 90% de los ginecólogos, obstetras, pediatras y perínatologos del país están de acuerdo que sea factible el aborto en las condiciones señaladas, y cuestiona el por qué el Senado de la República actúa de forma tan irracional.
Cuenta que un dilatado ejercicio medico por 30 años, le hacen saber las dificultades por la que atraviesan las mujeres cuando están en labores de parto, por lo que es inhumano agregarle a esta etapa una aberración como la señalada.
En otro orden el director de la Escuela de Derecho de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Antonio Medina Calcagño, rechazó la aprobación del Código Penal tal y como fue aprobado por el Senado de la República, por entender que aunque al país le urge una revisión de esa legislación, no puede darse el lujo de que sus políticas públicas, que deben ser inclusivas, se fundamenten en preceptos religiosos.
Medina insiste el reconocimiento de los derechos del embrión, pero también la Constitución reconoce a la madre el Derecho a la vida es igualitario para ambos.
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