Elpidio Tolentino Garrido.
Si una característica define a la ciudad, municipios y provincia de La Romana, es su ausencia de autoridades, funcionarios electos y designados que sepan sus funciones y las pongan en ejecución. Por décadas hemos vivido y padecido esos funcionarios, que no funcionan ni tienen autoridad.
Los casos son muchos, y su porcentaje rondando más del ochenta por ciento (80%), y cuidado si nos equivocamos y por el beneficio de la duda estamos siendo muy benévolos.
El caso lo saco ahora a colación, por algo que se está dando en el sector Los Caciques 5ta. Etapa, ubicado al Oeste de los Colonos, Sur del Invi, Suroeste de Villa España, y Norte de la Escuela Vocacional de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional (casi frente donde una vez funcionó el Centro Cervecero Los Colonos, de José Morales).
Aquí, en la Calle Manuel Emilio Beltré Sánchez, un poco al Norte de la Calle Guacanagaríx, un padre de familia ha instalado un negocio de vender cervezas frías y calientes por cajas; cervezas frías destapadas, y una cocina criolla para los consumidores de alcohol y algunos vecinos, y todo eso, hasta ahí, muy bien, y señas de que ese señor y su familia son de trabajo.
El PERO viene ahora, con la cocina y las cervezas ha llegado una potente bocina, con música a alto volumen, y en su mayoría de tiempo, de la llamada reguetones o raps, o como quieran llamarle. Llegan muchos jòvenes y el negocio está prosperando, solo que ahora llegan y ocupan todo el área de parqueo, parte de la calle, los callejones de los vecinos, y se orinan al aire libre porque en esa área verde no hay baños.
Y para completar, como el sitio se ha convertido en muy atractivo y trae gente de todo calibre, llegan con sus buenos equipos de música, que hacen apagar la bocina del dueño y retumban con sus indecencias dizque cantadas en los temas callejeros...
El escándalo es constante, no importa horario de toque de queda, porque en ese horario pasan las patrullas motorizadas (motocicletas de cuatro ruedas, se detienen, saludan, reciben algo y se van. El alto volumen sigue igual, decenas de personas hablando en alta voz compitiendo con los altos decibeles de las vocinas, y desafiando a la Junta de Vecinos que reclaman respeto.
Ya esos moradores de los Caciques 5ta. Etapa no saben que hacer, porque los policías del Toque de Queda son cómplices y permiten estar allí hasta altas horas de la maadrugada. No importa los pleitos que se han armado, y que en más de una ocasión han salido personas apuñaladas, las fiestas siguen a diario, especialmente los fines de semana, y nuestras autoridades ni por enteradas se han dado.
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