Oscar López Reyes.
Los robots sumergibles, el Sistema de Elevación para Salvamento en Océanos Profundos (Fadoss) ni los expertos exploradores han podido dominar, ni en la imaginación, la gran presión del ecosistema submarino donde reposa el Titanic, que acaba de tejer una nueva tragedia (cinco muertos), con la implosión de la embarcación Titán, que navegaba debajo del agua donde no llega la luz del Sol. ¿Se impone o no la vastedad y la inmensidad del reino de la naturaleza?